El 18 de enero de 1535, se funda la ciudad de Lima y, desde entonces, esta nueva ciudad española ha servido
como capital del Virreinato del Perú, centro y eje del poder español en América del Sur. Su fundación se realizó sobre el asentamiento principal del Curacazgo de Taulichusco, sobreponiendo la traza renacentista española sobre los caminos y edificaciones indígenas desarrolladas en la cultura local. Se construyó la casa de gobierno sobre el palacio de Taulichusco y la Catedral sobre un pequeño templo de adoración indígena. Desde entonces, la cultura urbana en el Perú, y en la ciudad de Lima en particular, emerge y se desarrolla en la negociación de las ideas, costumbres y tradiciones socio-espaciales generadas por la superposición y encuentro de migraciones locales, regionales e internacionales que alimentan su crecimiento cultural, social y espacial. En este proceso de crecimiento, cambio y continuidad, se suceden en ciclos temporales el orden y el caos.