La Escuela-Jardín Guadalaviar, emblemática obra del joven Fernando M. García-Ordóñez, es hoy una arquitectura de referencia –uno los nueve proyectos de la Comunidad Valenciana incluidos en la selección ibérica del Docomomo–. Su irrupción en el lánguido panorama arquitectónico de los 50, marcó un punto de ruptura con la tradición constructiva local, permitiendo una apertura a la sinceridad formal, la fluidez espacial y el bioclimatismo. Tras una difícil aceptación inicial, el impacto positivo del proyecto se tradujo en su difusión internacional –L’architecture d’aujourd d’hui; The Architect & Building News, etc.– y en la consolidación de la modernidad en Valencia. El presente artículo reflexiona sobre la pervivencia hasta nuestros días del imaginario arquitectónico de Guadalaviar, a pesar de la desaparición de muchos de sus elementos originales. Además, se analiza la Escuela-Jardín contando con nuevas fuentes primarias: las series fotográficas del seguimiento de la construcción y las memorias profesionales del arquitecto. Junto con la documentación original, se dispone así del marco hermenéutico más completo reunido hasta el momento. Y es que, precisamente a través del constructo originado por la fotografía y su aceptación social, la Escuela-Jardín ha desaparecido y, a la vez, sobrevivido a sí misma.
Fotografía y memoria en la construcción del imaginario moderno
La Escuela-Jardín Guadalaviar (Valencia, 1959)
Autor (es) del articulo
Juan Ramón Selva Royo
Javier Cortina Maruenda
Resumen
Tópicos Construcción | Investigación
Cita
- 2017
- 07
- 134-143
- 2340-9711
- Fotografía y memoria en la construcción del imaginario moderno
- abril 2017
- Selva Royo, J. R. y Cortina Maruenda, J
- Selva Royo, Juan Ramón y Javier Cortina Maruenda
- Selva Royo, J. R. y Cortina Maruenda, J
- SELVA ROYO, J. R. y CORTINA MARUENDA, J
- Selva Royo, Juan Ramón y Javier Cortina Maruenda
Publicado en
- rita_07
- abril 2017
- págs 134-143